Personajes y Oficios

El guardián del cementerio

Sepulturero es un oficio que, aunque discreto, está lleno de […]

Sepulturero es un oficio que, aunque discreto, está lleno de simbolismo y profundidad. Este guardián de la eternidad no solo se encarga de preparar el lugar para dar reposo a quienes han partido, sino que también mantiene vivo el respeto por las tradiciones y la memoria colectiva de la comunidad granadina. Cada sepultura que realiza es un acto de despedida, con cuidado, dignidad y una comprensión profunda del valor de los rituales de la vida y la muerte.

Don Luis Carlos, se ha convertido en un custodio del espacio donde la historia personal y colectiva se encuentra. Su labor es también un puente entre generaciones, pues los cementerios son un reflejo de las familias, los valores y las historias que han dado forma al municipio.

Más que un oficio, su trabajo es un servicio a la comunidad, recordándonos que cada vida deja una huella que merece ser honrada. Su dedicación asegura que los lugares de descanso eterno sean no solo espacios de silencio, sino también de respeto y conexión con el pasado, permitiendo que la memoria florezca incluso en la quietud.